Honor Watch GS Pro | Análisis y opinión

Hace aproximadamente 2 meses Huawei presentaba sus nuevos relojes inteligentes: el Huawei Watch GT 2 Pro y el que ocupa esta prueba, el Honor Watch GS Pro. Ambos modelos ofrecen las mismas funciones de software y sólo cambia algo respecto a los materiales utilizados, de tipo «premium» en el Huawei  (titanio y zafiro) y con un mayor enfoque al deporte en el Honor (más ligero, acero y diseño rugerizado con resistencia de grado militar). Y es que por si no lo sabías, Honor es una submarca dentro del imperio de Huawei.

El Honor Watch GS Pro dispone de GPS integrado para realizar un seguimiento de tus entrenamientos en exterior, almacenamiento de música y reproducción a través de auriculares conectados por Bluetooth, una enorme pantalla AMOLED de 1,39″ con muchísimo brillo y calidad, sensor de pulso óptico tanto para tus entrenamientos como para realizar un registro durante todo el día de pulsaciones y estrés, una inmensa autonomía y hasta muchas de las métricas de Firstbeat (las mismas que Garmin). Y todo eso por un precio que en este momento no supera los 200€. 

Llevo usando de forma alterna el Honor Watch GS Pro desde hace algo más de un mes, y de forma intensiva las últimas semanas tanto durante los entrenamientos como siendo mi único reloj de diario. Y a medida que más lo usaba, más me iba gustando (incluso a pesar de sus defectos, algunos de ellos importantes como veremos más adelante). 

Tras todo este tiempo de uso tengo un montón de datos e información, específicamente de deporte y actividad, pues en definitiva de eso es de lo que trata esta web y el motivo por el que has llegado a este análisis. Lo cual no quiere decir que no cubra también el resto de aspectos técnicos y de funcionamiento del reloj. El objetivo de este análisis es cubrir todo lo bueno que tiene que ofrecer el Honor Watch GS Pro, pero también lo malo y lo que no es aceptable. 

Así que vamos con el análisis completo de todos esos detalles.

Especificaciones del Honor Watch GS Pro

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Honor Watch GS Pro

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Antes de entrar de lleno en todo lo que ofrece el Honor Watch GS Pro creo que lo más conveniente es dar un repaso a sus especificaciones técnicas. 

• 48mm de diámetro
• 13,6mm de grosor
• Pantalla AMOLED táctil 1,39″
• Resolución de 454×454 píxeles
• Bisel de acero inoxidable 316L
• Caja y correa de fluoroelastómero
• Peso total 77 gramos (reloj sin correa 45,5 gramos)
• Cumple estándar de durabilidad militar MIL-STD-810G
• Sumergible hasta 50 metros
• Correa de 22mm estándar
• GPS + GLONASS
• Más de 100 perfiles de deporte (incluyendo natación en aguas abiertas, triatlón)
• Altímetro barométrico
• Brújula magnética
• Navegación de vuelta a inicio (no permite cargar rutas de navegación)
• Autonomía: hasta 25 días en modo reloj, hasta 48 horas con uso de GPS, hasta 100 horas de GPS con el modo de ahorro de batería. Carga completa en menos de 2 horas
• Reproducción de música desde el reloj (carga de canciones compatible sólo con Android)
• Permite contestar y realizar llamadas con un teléfono emparejado por Bluetooth gracias a su micrófono y altavoz interno (no tiene LTE)
• Seguimiento de frecuencia cardíaca 24 horas
• Monitorización de actividad y sueño
• Monitorización de estrés
• Estimación de saturación de oxígeno en sangre (SpO2), activación manual
• Métricas avanzadas de Firstbeat (VO2Max, Training Load, Training Status, Training Effect, tiempo de recuperación, calorías, planes de entrenamiento de carrera)

Hay algunas características sorprendentes para un reloj de su precio, como la enorme pantalla AMOLED de casi 1,4″ o la autonomía de la batería. Pero vamos a continuación con todos esos detalles.

Aspectos básicos del Honor Watch GS Pro

Si hay algo que destaca por encima de todo en este reloj es sin duda su pantalla AMOLED. Enorme, con una calidad altísima tanto en brillo como en resolución y con unos marcos bastante reducidos. Como referencia puedo decirte que un Garmin Fenix 6X Pro tiene una pantalla del mismo tamaño, pero con 3mm más de circunferencia (48mm del Honor contra 51mm del Garmin).

La visualización en exterior incluso en días soleados es perfecta, no hay ningún problema incluso en entrenamientos realizados bajo un sol de justicia.

El manejo del reloj se realiza a través de esa pantalla, con una respuesta táctil muy buena similar a la de un teléfono móvil. Además el reloj cuenta con dos botones de control adicional, pudiendo configurar el inferior para la función que más nos interese.

Sin ser un reloj que podamos considerar ligero, tampoco es pesado dado su tamaño. El peso total es de 77 gramos, de los cuales 31,5 corresponden a la correa. No resulta incómodo siempre y cuando tengas una muñeca que sea capaz de dar soporte a un reloj de este tamaño.

Por defecto la pantalla del reloj se mantiene apagada, reconociendo el giro de muñeca de forma bastante correcta. No llega al nivel de precisión de un Apple Watch, pero casi siempre responde con rapidez al levantar la muñeca. 

Algo que necesitaría un repaso es la estructura y composición de los menús. Accediendo al menú encontramos una lista de opciones demasiado larga, con hasta 22 entradas. Encontrar la opción que buscamos no siempre es fácil.

Además hay opciones que se repiten. Por ejemplo, todos los «widgets» del modo reloj tienen su versión dentro del menú de opciones, donde sí podemos acceder a mayor información. Accediendo al widget de actividad sólo veremos la pantalla resumen sin mayor detalle, pero si lo hacemos a través de la opción dentro del menú sí podemos deslizar de abajo hacia arriba para entrar en todos los detalles.

Si navegamos a través de los menús podemos activar distintas esferas de reloj para el modo de espera, a cambio de reducir algo la vida de la batería. Pero con la autonomía que ofrece este reloj, sinceramente (hasta 25 días en modo reloj o 48 horas con uso de GPS en modo rendimiento), no es algo que me preocupe en absoluto.

Mi objeción respecto a estas esferas es que no concuerdan con la esfera que hayamos configurado. Es decir, no se trata de una versión de bajo consumo de la esfera que hayamos seleccionado, por lo que no hay una «continuidad» a nivel de interfaz de usuario al usar el reloj.

Es posible configurar un horario de «no molestar», en el que la pantalla no se encenderá al recibir una notificación o al detectar el giro de muñeca, para evitar que el reloj se convierta en un faro en mitad de la noche. Si hemos configurado una esfera de reloj en espera la pantalla se quedará oscura, o al menos es lo que debería. Sin embargo en más de una noche y más de dos he encontrado que esta opción no funciona correctamente y la pantalla está encendida en mitad de la noche.

No es el único problema que presenta el modo de no molestar programado. Si queremos activarlo de forma manual (desde el menú de acceso rápido) por el motivo que sea, al desactivarlo eliminamos la configuración de programación del modo, teniendo que volver a entrar en el menú para activarlo manualmente. Evidentemente no es como debería de funcionar.

Continuando con las posibilidades de configuración de la esfera del reloj, dentro de las opciones podemos elegir entre multitud de opciones, y si no te gusta ninguna de ellas desde la aplicación Huawei Health podremos instalar cualquiera de las muchas otras que allí se ofrecen.

Desde la pantalla principal podemos acceder a diferentes opciones deslizando en la pantalla. Si lo hacemos de izquierda a derecha (o viceversa) podemos ver los diferentes «widgets» que nos ofrecen información rápida de actividad, sueño, frecuencia cardíaca, estrés, el tiempo o acceso directo al reproductor de música.

Deslizando desde arriba hacia abajo accedemos a un menú de acceso rápido.

Y si lo hacemos de abajo hacia arriba, lo que aparecerán serán las notificaciones.

El Honor Watch GS Pro sólo nos permite mostrar notificaciones, pero no hay ningún tipo de interacción con ellas. No es posible responderlas (ni con Android ni con iOS), pero tampoco eliminarlas del reloj. Tampoco muestra smileys ni imágenes.

Estas notificaciones se muestran sólo durante el «modo de reloj», no mientras estamos realizando un entrenamiento.

Donde encontramos algo que no es habitual en relojes de este tipo es en el manejo de llamadas. La mayoría de los relojes simplemente nos mostrarán las llamadas en pantalla y como mucho nos dejarán aceptarla o rechazarla. Pero con el Honor GS Pro podremos contestar la llamada y mantener la conversación desde el reloj gracias a su micrófono y altavoz.

Y no sólo recibir llamadas, también podemos realizarlas a números de hayamos seleccionado para que aparezcan en contactos o en el registro de últimas llamadas.

Para hacer uso de esta función es necesario que llevemos el teléfono encima ya que la llamada se realiza a través de Bluetooth. Es decir, el reloj no cuenta con LTE ni permite insertar una tarjeta SIM para que funcione de forma independiente.

El Honor Watch GS Pro funciona correctamente tanto con teléfonos Android como iPhone para todas estas funciones, incluyendo también la actualización de la previsión del tiempo. Sin embargo sólo podemos añadir música a través de la aplicación Huawei Health en un teléfono Android, y antes tendremos que haber descargado esa música en el propio teléfono. Eso no lo podemos hacer con un iPhone ni tampoco a través de un ordenador. Tampoco funciona con servicios de música en streaming como Spotify o Amazon Music si tenías esperanza de poder descargar listas de reproducción.

Por último, no disponemos de pagos inalámbricos, asistentes virtuales o posibilidad de descargar aplicaciones al reloj.

Seguimiento de actividad, descanso y salud

Ya tenemos bastante asumido que un reloj de este tipo debe realizar un seguimiento completo de actividad a lo largo del día. Y no sólo del día, también durante la noche. Como no podía ser de otra manera, el Honor Watch GS Pro también hará este seguimiento. 

Dentro de los widgets disponibles en el reloj tenemos uno para la actividad. Deslizando de izquierda a derecha (o viceversa) podrás encontrarlo.

Efectivamente, estos círculos que representan nuestra actividad se asemejan totalmente a los que ofrece el Apple Watch. Nos muestran los pasos diarios, minutos de actividad y horas que hemos permanecido activo. Para completar estos objetivos tenemos que:

• Pasos: Caminar al menos 10.000 pasos al día
• Minutos de actividad: Al menos 30 minutos de entrenamiento activo al día (del deporte que sea)
• Horas en actividad: Levantarse al menos una vez cada hora, durante 12 horas del día

Esos son los objetivos y no los podremos modificar por otros que se ajusten mejor a nuestro uso habitual.

En el propio widget no disponemos de más información, pero si accedemos desde el menú a la opción de «Registros de Actividad» podremos ver el detalle de toda esta actividad.

Todos los datos se sincronizarán a la aplicación Huawei Health, donde tendrás los datos replicados como en la inmensa mayoría de monitores de actividad.

Me rechina que, a la hora de contar los metros ascendidos, le da lo mismo si éstos se han hecho corriendo, subiendo escaleras o en bicicleta.

El reloj dispone de detección automática de actividad. Si estás haciendo alguno de los entrenamientos soportados (caminar, correr, remo o elíptica) y has activado la opción, el reloj te avisará si quieres registrar lo que estás haciendo como un entrenamiento, contabilizando desde que has comenzado el ejercicio.

En el caso de actividades con uso de GPS, el track de la actividad no se mostrará al principio, aunque los datos de distancia recorrida estarán presentes gracias a lo que ha registrado el acelerómetro interno.

En general la aplicación de Huawei es satisfactoria en cuanto a datos básicos, aunque no ofrece informes con algún tipo de detalle más allá de los resúmenes semanales o mensuales.

También hay seguimiento de sueño gracias al algoritmo Huawei TruSleep, cuyo widget también tiene el mismo comportamiento que el de actividad, aunque en este sentido nos ofrece bastante menos información.

En la aplicación tampoco hay datos demasiado elaborados, aunque algo que sí destaca es que es capaz de detectar (y tener en cuenta) siestas a lo largo del día. 

Eso sí, en cuanto a detección de la hora de comenzar el sueño no es demasiado preciso ya que si estás en la cama leyendo o viendo la televisión lo detectará como horas de sueño aunque lo marque como periodo en el que has estado despierto.

En la parte trasera del reloj encontramos un sensor de pulso óptico que está siempre funcionando, registrando tu frecuencia cardíaca a lo largo del día.

El widget de actividad ofrece todos los detalles del día de un vistazo rápido; incluyendo máxima, mínima, FC en reposo y FC actual

Además de ver los detalles en el reloj la aplicación de Huawei también recoge todos estos datos, ofreciendo detalles muy parecidos a los de actividad.

En cuanto a la validez de los datos, encuentro que están muy en consonancia con los que obtengo de otros relojes como Garmin o Polar. Eso sí, no todos registran la FC en reposo de la misma manera. Algunos fabricantes tomarán el dato del valor más bajo del día (que normalmente será durante el sueño), y Huawei usa como referencia el valor al despertarse.

Ese mismo sensor ofrece registros de estimación de saturación de oxígeno en sangre (SpO2), pero las tomas tendrás que hacerlas manualmente ya que no hay seguimiento a lo largo del día.

La saturación de oxígeno en sangre es algo que ahora está en boca de mucha gente a causa del COVID, pero no es más que una variable más de una enfermedad muy complicada. Y una tasa baja de oxígeno en sangre no es algo exclusivo del COVID, también puede ocurrir en otras circunstancias.

También tenemos seguimiento de estrés a lo largo del día, también gracias a ese sensor de pulso óptico integrado con la tecnología de Huawei. 

Valorar la fiabilidad de esta medición es mucho más complicado, así que tendremos que creernos lo que ahí nos indique.

Deporte con el Honor Watch GS Pro

Si estás en esta página leyendo este análisis es porque sin duda te interesa el deporte. Y es precisamente el segmento al que Honor ha enfocado este modelo. No estamos ante un reloj inteligente que tiene capacidades para poder realizar deporte, sino que se trata de un reloj deportivo de pleno derecho.

Prueba de ello es que contamos con muchas métricas de rendimiento de Firstbeat, al igual que podemos encontrar en relojes de otras marcas como por ejemplo Garmin. De hecho, el fabricante norteamericano compró la parte de analítica hace algunos meses.

En concreto estas son las métricas de Firstbeat que encontramos en el Honor Watch GS Pro:

• Estimación de VO2Max
• Carga de entrenamiento
• Estado de entrenamiento
• Efecto de entrenamiento
• Tiempo de recuperación
• Planes de entrenamiento de carrera
• Calorías

Son las mismas que podemos encontrar en el Garmin Fenix 5 y que puedes ver en el análisis de dicho modelo.

En el Honor Watch GS Pro encontramos más de 100 perfiles de deporte (incluyendo natación en piscina, aguas abiertas o triatlón). Algunos de ellos son simplemente un perfil diferente sin aportar nada más allá de una configuración específica, pero otros sí que aportan funcionalidad extra como los de esquí o remo.

Es posible configurar cada uno de los perfiles, pero el proceso es bastante extraño. En lugar de encontrar la configuración de pantallas dentro de las opciones de los perfiles (junto al resto de configuraciones) o poder configurar los perfiles desde la aplicación, para modificar las pantallas de datos hay que iniciar una actividad.

Una vez iniciada la actividad encontramos nuestras pantallas de datos por defecto, deslizando hacia arriba o abajo. Hay cinco pantallas diferentes, más una adicional para el efecto de entrenamiento (que podemos desactivar). Podemos cambiar los datos que aparecen en ella, pero no la disposición ni para qué sirve cada una de ellas.

Es decir, si una pantalla tiene cuatro datos, serán cuatro datos los que tenemos para elegir. Pero no podemos pasarla a tres. La pantalla que sólo tiene un dato seguirá teniendo un dato, el que sea, pero sólo uno.

Además de los datos que aparecen en pantalla tenemos un anillo que rodea la pantalla que nos indicará la frecuencia cardíaca en ese momento. Y en la parte inferior la hora del día.

Para modificar esos datos, como digo, debemos empezar un entrenamiento (no antes). Dejando pulsado alguno de los datos que aparecen en pantalla nos aparecerá la opción para elegir cuál queremos cambiar.

La posibilidad de elección de datos es bastante escueta. En concreto esto es lo que podemos seleccionar: tiempo, distancia, frecuencia cardíaca, ritmo instantáneo, ritmo medio, velocidad instantánea, velocidad media, calorias, cadencia, pasos, ascenso total, descenso total, altura total, presión atmosférica y reloj.

Si deslizamos de derecha a izquierda encontramos el reproductor de música y el mapa con la ruta que hemos realizado, pudiendo hacer un «trackback» en cualquier momento.

Es la única navegación que encontramos ya que no hay posibilidad de cargar ningún tipo de rutas con las que, al menos, podríamos ver el camino teórico que debiéramos seguir.

Siguiendo con los problemas que nos presenta este reloj, no soporta el emparejamiento con ningún sensor externo. Ni siquiera un sensor de pulso a través de Bluetooth. Esta es una omisión realmente importante ya que nos obliga a utilizar de forma exclusiva el sensor óptico integrado en el reloj, incluso en las situaciones en las que no lo llevemos en la muñeca. Por ejemplo si lo colocamos en el manillar de una bicicleta o encima de una chaqueta en invierno.

Tampoco podemos ordenar la lista de deportes. Si por ejemplo borras el perfil de carrera y lo quieres volver a añadir (me ha ocurrido), éste se quedará al final de todo el listado, incluso aunque sea el más utilizado.

En cuanto a otras configuraciones que podemos hacer en los perfiles de deporte podemos seleccionar objetivos (de distancia, tiempo o calorías), avisos y alarmas (vuelta automática, lap a través del botón inferior y alarma de frecuencia cardíaca), un asistente virtual a modo de «virtual partner» y en algunos perfiles configuración de ahorro de batería para llegar hasta 100 horas.

Un sistema bastante caótico y que no está a la altura de lo que podemos esperar de un reloj para hacer deporte. Huawei tiene una muy buena base, pero necesita trabajar bastante más su aplicación para ofrecer la funcionalidad mínima que podemos esperar de un reloj de este tipo.

Una vez terminado el entrenamiento podremos ver en el reloj un resumen con todas las estadísticas, junto a gráficas bastante estéticas.

Ese entrenamiento se sincronizará, en algún momento, con la aplicación de Huawei Health. Y digo lo de algún momento porque el entrenamiento aparecerá… eventualmente. Al menos en la aplicación de iOS.

Por tanto, el gesto habitual que puedes tener al volver de entrenar de sincronizar el entrenamiento y revisar detalles en la aplicación, tendrás que cambiarlo por ver primero si el entrenamiento aparece o no. El caso es que los datos se sincronizan (porque en el resumen de actividad diaria sí aparece la distancia o pasos), pero por algún extraño motivo en ocasiones no aparece directamente en la aplicación.

Una vez haya aparecido el entrenamiento los valores que podemos ver en la aplicación son bastante estándar.

Dirás… bueno, también lo puedo mirar en Strava. Pues no, no puedes. La aplicación Huawei Health no permite sincronizar entrenamientos con ninguna plataforma externa. No sólo eso, tampoco permite exportar la actividad a ningún tipo de archivo, ni descargarlo ni enviarlo a través de correo electrónico. 

Esto es un problema enorme, y algo que no me cansaré de criticar a todas las marcas que hacen algo parecido. Los datos de esos entrenamientos pertenecen al usuario, que es quien los ha realizado y debe ser él quien decida qué hacer con ellos y dónde enviarlos. Ninguna marca puede tener el derecho de «secuestrar» esos datos ni limitar su uso con cualquier otra plataforma que elijamos.

Así que no podrás compartir un entrenamiento con amigos en Strava, ni con tu entrenador a través de TrainingPeaks. No podrás enviar a un familiar un GPX de una ruta que hayas realizado para que él también pueda conocerla. No podrás utilizar aplicaciones de escritorio como GoldenCheetah para realizar un análisis de tu temporada ni planificar picos de carga de entrenamiento. 

Bueno, en realidad hay un método para hacerlo (que es el que yo he conseguido llevar a cabo para realizar los análisis de sensores que verás a continuación), solicitando los datos a través del formulario de GDPR a través de Huawei y utilizando Hitrava, una pequeña aplicación escrita en Python para pasar el archivo JSON genérico a archivos comunes en TCX.

Pero no es una solución viable, pues desde la solicitud de los datos hasta que Huawei te avisa que la descarga está disponible puede pasar uno o dos días. 

Sin duda alguna, éste es el peor aspecto que presenta el Honor Watch GS Pro.

Recepción GPS y sensor de pulso óptico

Antes de comenzar con las comparativas y ver cómo rinden los sensores internos del Honor Watch GS Pro, me gustaría aclarar cómo realizo los análisis de GPS que verás a continuación: con los relojes acompañándome en mis entrenamientos habituales. Llevando tanto el Honor como otros modelos, y comprobando dónde aparecen los problemas.

No tengo ninguna ruta definida para establecer una puntuación por el sencillo motivo que hay otros factores externos que no debemos de olvidar nunca. Cosas como nubes, hojas de los árboles o simplemente la posición del satélite pueden alterar los resultados del GPS de un día para otro. Es por este motivo por el que prefiero hacer este tipo de comparativas en lugar de tener un recorrido predefinido y valorarlo a partir de este. 

Empezaré por este entrenamiento de carrera con ida y vuelta sobre la misma ruta. Junto al Honor Watch GS Pro me acompañan el Garmin Forerunner 945 y el nuevo Polar Vantage V2.

Nada más empezar podemos ver cuál es el comportamiento habitual que nos vamos a encontrar en las gráficas del Honor. Huawei recurre al mismo «truco» que Apple, haciendo un suavizado algo exagerado de los datos de GPS. El resultado son gráficas muy estéticas y bonitas en las que no se perciben errores de precisión (precisamente porque están suavizados), pero que conlleva que en los giros y curvas vayamos comiendo metros poco a poco.

Cuanto más acusada sea la curva, más se va a notar ese suavizado y el efecto que tiene a la hora de recortar las curvas.

Es algo que en la aplicación resulta aún más notable.

Sin embargo también tiene sus lecturas positivas. Esta zona de Puerto Banús es un punto en el que habitualmente hay problemas con todos los relojes (como es el caso en cuestión en ese punto con la gráfica del FR945). Se corre debajo de una fila de árboles frondosos y con edificios a ambos lados de la calle, por lo que la recepción y triangulación es mucho más complicada que en un espacio abierto.

He marcado la zona por la que se pasa corriendo con una línea de color naranja.

Se puede ver perfectamente cómo el 945 se va totalmente de la línea correcta tanto a la ida como a la vuelta. El Polar Vantage V2 tiene un comportamiento bastante bueno, mientras que en un sentido el Honor clava la trazada correcta; aunque a la vuelta lo hace también recto, pero desplazado del trayecto real. 

En definitiva, ese suavizado suele ser perjudicial… pero cuando la situación se complica puede ayudar a no acumular metros de más, y todo con la intención de que tanto distancia como ritmos sean más precisos. Las gallinas que entran por las que salen, supongo.

Vamos ahora con un entrenamiento en bici. Normalmente es más fácil ver tracks con buena precisión debido a que la velocidad a la que nos movemos es más elevada, por lo que la distancia entre puntos es mayor quedando estos más separados.

Además, en carretera abierta los problemas de recepción de señal no suelen estar presentes pues no hay edificios o árboles que entorpezcan la visión.

Si vamos a los puntos del trazado recto en el que voy más rápido podemos apreciar un rendimiento perfecto por parte de los tres dispositivos. El Honor Watch coincide a la perfección con el track registrado por el Polar Vantage V2 y el Garmin Edge 830.

Sin embargo, más adelante en la ruta, encontramos problemas por parte del Honor Watch. En esta serie de curvas enlazadas el Honor vuelve a acusar el excesivo suavizado de la señal GPS, provocando que se «coma» las curvas tanto en el trayecto de ida como en el de vuelta. 

Además, no sólo se come las curvas sino que se encuentra desplazado con respecto a la ruta real, de nuevo provocado por ese suavizado que realiza artificialmente con el objetivo de conseguir trazados estéticos y sin dientes de sierra.

Pasemos ahora a un entrenamiento de natación en aguas abiertas. Para un reloj GPS es una de las situaciones más complicadas, pues cada vez que metemos la mano en el agua el reloj pierde la recepción de satélites, por lo que tiene que realizar la triangulación en el poco tiempo que pasa la mano fuera del agua, y un algoritmo realizar la corrección.

El comportamiento del Honor ha sido muy similar al del Garmin Fenix 6 Pro Solar, el que mejor rendimiento ha mostrado en este entrenamiento, salvo en la parte del principio en la que ha realizado un giro un tanto extraño. 

Pero una vez sobrepasado ese punto y tras encontrar el track correcto, tanto Fenix 6 como Honor van a la par. Bastante mejor que el Garmin Forerunner 745 que ha tenido bastantes problemas en la vuelta y que como puedes comprobar en la parte que he señalado con la flecha, sencillamente ha realizado una línea totalmente recta.

El resumen de todo esto es que el comportamiento del GPS es bastante correcto a pesar del suavizado excesivo que aplica Huawei a su algoritmo. ¿Es la precisión del Honor Watch GS Pro perfecta? En absoluto, está lejos de serla (como el resto de relojes GPS), pero es totalmente aceptable incluso para los exigentes a la hora de contar con una distancia precisa, situando el margen de error típico por debajo del 1% en actividades de carrera o ciclismo. Incluso en natación en aguas abiertas el comportamiento es satisfactorio.

Por no tener un sitio específico donde incluirlo, pongo a continuación una captura para poder comparar el altímetro barométrico. 

En la parte de llano a nivel del mar hay algo de inconsistencia en los tres dispositivos. No es algo que me parezca notable, pues estamos hablando de diferencias de uno o dos metros de diferencia y tampoco tengo una forma de saber cuál es el dispositivo que está ofreciendo la medición correcta.

Sin embargo cuando comienza la subida los tres dispositivos se alinean perfectamente. Aquí vemos cómo el Vantage V2 tiene algunos problemas puntuales, mostrando algún pico irregular, pero tanto el Edge 830 como el Honor Watch GS Pro muestran unas subidas y bajadas muy regulares sin ningún otro incidente.

Paso ahora a dar un repaso al sensor de pulso óptico de diseño propio. Pero antes de mostrarte comparativas de diferentes sensores, quisiera recordar algunos aspectos básicos de los sensores ópticos.

Debes tener en cuenta que un pulsómetro de muñeca no funciona de la misma forma en todos los cuerpos. Todos somos distintos, y si además en la ecuación metemos cosas como tono de la piel, tatuajes, vello corporal… la diferencia de persona a persona puede ser bastante grande.

En mis pruebas no es que el espectro de usuarios sea muy amplio: estamos yo y yo mismo. Así que lo que a mi me funciona bien puede que a otro no lo haga, o que sea mejor.

Pero lo más importante a tener en cuenta es que hay que seguir unas pautas para llevar el sensor. Debe estar apretado (pero no que te corte la circulación), suficiente como para que el reloj no se mueva libremente en la muñeca. Dejando una separación de aproximadamente un dedo con respecto al hueso de la muñeca. Cumpliendo estos detalles te asegurarás que vas a conseguir los mejores resultados que tus condiciones pueden ofrecer.

Bien, una vez aclarado esto veamos algunas comparativas de sensores ópticos. Empezaré por un entrenamiento suave a ritmo constante, algo que cualquier sensor debe poder realizar a la perfección.

En general la gráfica es bastante correcta entre los dos sensores ópticos del Honor Watch y el Polar Vantage V2, comparado con el sensor de pecho HRM-Tri de Garmin.

He señalado dos puntos en los que el Honor pierde un poco el hilo y se separa con respecto a las otras dos gráficas, pero no hay diferencias excesivas ni picos de pulsaciones incorrectas. ¿Por qué aparece la gráfica de esa manera? Creo que el motivo es similar al del GPS, Huawei utiliza un suavizado excesivo lo que provoca que en las gráficas aparezcan valores inferiores y líneas con menos dientes de sierra que en los otros dos integrantes de la comparativa.

De hecho en el siguiente entrenamiento se puede apreciar un comportamiento muy similar en los puntos donde he señalado con las flechas. La gráfica del Honor es paralela a la de los otros dos relojes, pero siempre ofreciendo una lectura más baja.

La parte marcada al principio dentro de un círculo es simplemente un error de registro, puede ocurrir en ocasiones y no es algo que me preocupe demasiado porque no es lo común.

Volviendo al problema del suavizado, es algo que sólo se aprecia en las gráficas a la hora de revisar el entrenamiento, lo cierto es que comparando valores a mitad de entrenamiento y con intensidad constante la lectura que daban los tres relojes era la misma (pulsación arriba o abajo).

La diferencia en la gráfica parece importante, pero la separación real no es de más de 3 o 4 pulsaciones en los puntos de mayor separación. 

Al final de ese mismo entrenamiento hice 6 sprints de 30 segundos, aquí puedes ver esa parte ampliada.

La gráfica de referencia es la de color azul, pues es la del sensor Garmin en el pecho. La gráfica del Honor no tiene demasiado retraso en la subida o bajada de pulsaciones, o al menos no muy diferente a la del resto de modelos de la competencia, como puedes comprobar en la comparativa con el Vantage V2.

Paso ahora a un entrenamiento de intervalos puro, pero esta vez en bici y haciéndolo en rodillo (donde no hay vibraciones y otros movimientos que entorpezcan el registro correcto).

Quizá con las tres gráficas no resulte demasiado cómodo ver las diferencias, así que voy a eliminar un momento la del Vantage V2, que tiene bastantes picos incorrectos, para verlo con mejor claridad.

Puedes apreciar que aquí no hay apenas suavizado y que ambas gráficas son muy similares. Sí, hay cierto retraso en los registros de frecuencia cardíaca, pero es como funcionan los sensores ópticos. Te amplío alguno de esos intervalos para que lo puedas ver con mayor claridad.

En general el rendimiento en ciclismo de interior es bastante bueno. ¿Qué hay del ciclismo en exterior? Pues nuevamente se sitúa con respecto a la media de los sensores de pulso óptico, ofreciendo un rendimiento francamente malo.

En este caso el Vantage V2 ha sido algo mejor, dentro de que tampoco tiene un registro correcto. 

Se trata del comportamiento habitual de los sensores ópticos en ciclismo, no es algo exclusivo del Honor. Pero el problema radica en que no es posible conectar con un sensor de pulso externo, por lo que va a ser totalmente imposible el poder tener valores correctos en nuestras salidas de ciclismo. 

En definitiva, el sensor de pulso óptico del Honor Watch GS Pro es pasable. No destaca por su fiabilidad, pero no se trata de algo nefasto. Tiene el mismo problema de suavizado que el GPS, que Huawei aplica simplemente para obtener gráficas más bonitas y que no pensemos que el reloj funciona mal, pero no son unas diferencias exageradas ni tiene un funcionamiento errático.

Eso sí, mi principal objeción es la imposibilidad de utilizar un sensor de pulso externo, algo que Huawei debe reconsiderar, sobre todo porque es algo bastante normal en cualquier otro fabricante.

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Opinión Honor Watch GS Pro

Huawei, o Honor en este caso, tiene un hardware magnífico pero con un software a medio cocinar. El reloj de Honor ofrece muchas cosas positivas, especialmente si consideramos su precio actual de 199€. No es sólo su magnífica (y enorme) pantalla AMOLED o la eterna duración de batería; es que además tanto el GPS como el sensor óptico funcionan razonablemente bien.

Pero es una pena que se encuentre lastrado por las elecciones que se han tomado a la hora de preparar el software. Todo lo que rodea a los entrenamientos no está correctamente estructurado, y probablemente se deba a que en el equipo de desarrollo no hay nadie que no sólo practique deporte, sino que lo haga de forma competitiva. La interfaz de entrenamiento es estética y fluida… pero hay muchas cosas que deberíamos revisar.

Luego tenemos la incapacidad de exportar los entrenamientos de ninguna forma sencilla. En plenos 2020 es inadmisible, sobre todo teniendo en cuenta la cantidad de APIs disponibles entre los diferentes fabricantes y compañías de software y considerando que los entrenamientos ya están almacenados en la nube, simplemente tendrían que convertir la información JSON almacenada en un archivo genérico como un TCX y que al menos nos dejara enviarlo por e-mail. Es algo que cualquier desarrollador podría hacer en poco más de una hora.

Al menos en Honor nos han demostrado que a día de hoy es perfectamente posible hacer un reloj con una pantalla AMOLED magnífica sin que eso suponga no pasar de tres días de autonomía. La verdad es que no sé cómo Huawei lo consigue, pero la autonomía que ofrece este reloj es brutal.

¿A quién no recomiendo este reloj? A alguien que quiera muchos datos y métricas de entrenamiento. Si lo tuyo es el análisis pormenorizado y estructurar la temporada a partir de ahí, el Honor Watch GS Pro presenta, a día de hoy, muchas impurezas que pulir.

Sin embargo el GS Pro puede ser una opción magnífica para alguien que sea más casual en sus entrenamientos. Aquellos que entrenan simplemente para mantenerse en forma y disfrutar del deporte pero que no tienen ningún interés competitivo. En este rango de precio no se me ocurre ningún otro reloj que ofrezca una pantalla de esta calidad para tu día a día y con una autonomía que no defraudará ni a los más olvidadizos del cable de carga.

Aunque me gustaría que Honor siguiera trabajando en el software y puliendo todas esas cosas que hemos estado viendo. Porque es todo un tema de actualización de software, ya que el dispositivo no presenta ningún problema por lo que no hay que esperar a futuras iteraciones del producto.

¡Gracias por leer!