Las Brooks Glycerin 21, a primera vista, pueden parecer totalmente continuistas con respecto a las Glycerin 20. Pero que no te engañen las apariencias porque el nuevo modelo esconde una serie de cambios significativos que las convierten en una zapatilla más atractiva.
El primero de los cambios está en el upper, donde tenemos un tejido nuevo. Aunque la verdad, las sensaciones al calzar las Glycerin 21 son bastante similares a las que da su predecesora. A pesar del cambio no hay demasiadas sorpresas en el upper.
A medida que vamos avanzando por la zapatilla ya vamos encontrando cambios importantes. En la mediasuela tenemos la misma espuma DNA Loft v3 que se estrenó con las Glycerin 20 y mantiene también el mismo drop 10mm que ya es bastante característico de las Brooks.
Como ya sabréis, el proceso para fabricar este DNA Loft v3 es a través de un proceso super crítico inyectando nitrógeno a un molde donde se encuentra la espuma EVA. Así que sigue siendo una EVA de concepción tradicional, pero añadiéndole un preoceso químico.
Primer cambio notable: tenemos más cantidad de espuma. Las Brooks Glycerin 21 suben 2mm de altura. Pero eso no es todo. La amortiguación de las Glycerin 21 es ahora más blanda que la de su antecesora, lo que proporciona una sensación de confort aún mayor.
La suela también recibe cambios importantes, con un nuevo compuesto denominado RoadTack, que ofrece mejor agarre tanto en superficies secas como en mojado. Además hay más vaciados en la suela, evitando el uso de goma de forma indiscriminada y cubriendo sólo los puntos necesarios.
Espera que no han acabado todos los cambios… Han aumentado de tamaño, han añadido más espuma… y ahora son más ligeras que el modelo anterior. Así que chapó al equipo de ingenieros de Brooks.
En cuanto a las sensaciones que dan las Brooks Glycerin 21, dentro de la categoría en la que militan (maximalistas para rodajes cómodos) lo cierto es que añaden la capacidad de ser más dinámicas que unas Nike Invincible 3 o unas ASICS Nimbus 26.
Opinión Brooks Glycerin 21
En muchas ocasiones, cuando llega un nuevo modelo al mercado, podéis pensar que es el momento de hacerse con el modelo anterior a un precio rebajado. Y es una táctica que suele funcionar bastante bien en muchas ocasiones.
Pero sinceramente, creo que no es el caso que nos ocupa. Estas Brooks Glycerin 21 son mejores en todos los aspectos respecto al modelo que sustituyen. Añade una serie de pequeños cambios que, en su conjunto, hacen un paquete más interesante.
No llegan a ser tan blandas y cómodas como pueden ser unas Nimbus 26, pero a su favor cuentan con que, precisamente por no ser tan cómodas, sí son más dinámicas.
La Glycerin 21 se enfoca al usuario que está buscando una zapatilla rodadora que le aporte comodidad, pero que no limite si hay que aumentar el ritmo. Es cierto que no tiene un rocker excesivo ni te van a llevar a acelerar el ritmo, pero no tienen un volumen excesivo ni se encuentran demasiado incómodas cuando aumentamos ligeramente la velocidad.
No va a ser la zapatilla más emocionante del mercado, pero es que también necesitas zapatillas de este tipo en tu rotación: algo con lo que poder sumar kilómetros y kilómetros de cara a correr una maratón o una media.
En definitiva, si eres usuario habitual de Brooks y te gusta cómo hacen sus zapatillas, creo que con las nuevas Glycerin 21 vas a estar más cómodo que nunca. Porque es lo de siempre… pero mejor.
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